Bueno, la verdad es que tampoco hay mucho que decir de este expomanga: mismos especímenes de siempre y tal. Entre lolitas (por dios, adelgazad antes de embutiros en un traje lleno de volantes, con vuestra masa corporal no os favorece nada...), góticos y góticas varias (lo mismo de antes va para vosotras queridas, y hacedle un favor al mundo: ¡dejad de compraros todas el mismo corpiño y la misma falda!¡Variad vuestro vestuario y no invadáis el mundo con clones, leñe!) y emos (de estos últimos ya he hablado en su momento, conocéis mi opinión), por no hablar de las colegialas... Si no vais a hacer cosplay, por lo menos venid vestidas de gente normal, no necesitamos que nos demo
stréis lo otakus que sois. Cabe destacar algunos cosplays realmente buenos, que siempre los hay, aunque no abunden: La chica que iba del Espada ese que es uncientífico loco, no recuerdo como se llama, los menos grande, Rorschach, Edea, y la Reina aquella de Corazones...
Eso si, no hay expomanga que no sea capaz de subirte el autoestima, en serio. Mi rencor hacia los señores de telepizza que no hicieron el esfuerzo de cortarla (he aquí una foto de mi recogiéndome el pelo para no pringarme y
disponiéndome a cortar la comida con la herramienta rudimentaria que tuvimos que apañar entre los dientes).
Al final, como siempre, fue más un día pasado en Madrid, en compañía de Bego, previo a la temporada de exámenes. Eso sí, no sé qué tendrán este tipo de eventos frikis, pero siempre me lo paso como una enana ^^.
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