Que los lectores no se dejen engañar por el título... No es sólo una Noche de Maquinación, es La Noche de Maquinación de Noviembre. Noche que se ha convertido en tradición, porque como bien dice mi Metafisicodélica Hermana, el CIHMA necesita descargar la tensión acumulada gracias a la crisis de Octubre-Noviembre. Y no hay mejor remedio que el alcohol, presente en forma de rica sangría (si es que hasta el nombre mola xD).
Después de cuatro horas de autobús (¿¿?? Indignante...), me reuní con Dune para empezar con lo del desahogo, pero se acabó la hora feliz y nos fuimos directamente al chino, y a por galletitas de la suerte, que se dedicaron durante todo el fin de semana a recomendarme que dejara a un lado mis ansias de sangre y me convirtiese al Buenrollismo (todos sabemos que es la religión que más odio en este mundo...). Cuando por fin terminamos de cenar (Mere ya se hallaba con nosotras) nos dirigimos a la residencia de la citada a vaciar tres litros de sangría. Sin duda una de las cosas más llamativas fue el ya mencionado momento de arreglarse para llamar la atención, o lo que yo llamo maquillarse en modo putón xD (lo que no influye en el hecho de que íbamos muy monas, todo hay que decirlo...)
La noche del viernes se perdió entre antros varios, dónde les descubrí a mis queridas hermanas el amplio mundo del zorreo aplicado al Death Metal. Siempre me quedará la duda de si los tíos nos miraban porque hacíamos el ridículo, porque teníamos pinta de normales, por ser monas... En fins, demasiadas variables y muy pocos datos comprobados. Acabamos cantando canciones de enanos por todo Madrid, golpeando en el suelo con nuestras botas, por supuesto. A las 6 de la mañana empezaron a notarse los estragos y yo ya ni siquiera me enteraba de cuando me miraban el escote... No puedo acabar el apartado del viernes sin una mención de honor a mi nuevo gorro de paja, gorro que encontré en el suelo y que ahora se encuentra clavado en mi pared con una chincheta ^^.
Después de un merecido descanso Mere y yo nos encaminamos al mercado a por algo de comer, que consistión en pizza, galletas de chocolate y panecillos (panecillos que constituyeron mi comida del día siguiente, porque sobraron xD). Después de una tarde en Fnac y tienda friki, paseando por el centro de Madrid (tarde que tampoco recuerdo mucho porque, la verdad sea dicha, estaba bastante ausente), nos encaminamos de nuevo a la resi de Mere a por más sangría, dejando atrás a Eleder y compañía, con los que quedamos en encontrarnos en Argüelles. Allí recogimos a los amigos de Mere, con los que acabamos la noche después de la escisión comentada por Dune en su blog (por tanto, no ahondaré más en ella), al que podéis acceder desde un link en la parte derecha de éste.
El caso es que después de más alcohol (calimora en este caso) Mere y yo acabamos subidas en un banco (¿por qué puñetas siempre acabo subida en un banco, sea con quien sea?) zorreando, aunque esta vez era pop, y no death metal ... xD.
Un fin de semana REmemorables, desde luego. Me despido con una foto que me encanta, (aunque no sé en qué momento la hicimos xD), y que nadie proteste, porque al fin y al cabo esto es una ego-entrada más que otra cosa... ^^.
miércoles, 26 de noviembre de 2008
lunes, 10 de noviembre de 2008
sábado, 1 de noviembre de 2008
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